Hugo Arana había nacido en un pequeño pueblo de la provincia de Buenos Aires, Juan José Paso, pero creció en Monte Grande (GBA), luego de que su familia se mudara a Lanús, también al sur del Gran Buenos Aires, estudió actuación con Marcelo Lavalle y, sobre todo, con Augusto Fernandes.
En sus primeros años como actor integró el grupo teatral Errare Humanum Est y actuó en películas como «El santo de la espada» (1970), «La tregua» (1974) y» El Soltero «(1977 ) junto a Claudio Garcia Satur y Fernanda Mistral.
Se hizo famoso a nivel nacional en el programa cómico televisivo Matrimonios y algo más -dirigido por otro grande: Hugo Móser-, allí representó dos personajes de gran repercusión popular: el «Groncho» (en el sketch «El Groncho y la Dama») y «Huguito Araña», un estereotipo de homosexual afeminado.
Este último, supo contar, se originó cuando debía entrevistar a Juan Carlos Dual en 1982, y al maquillarse y disfrazarse para dicha escena fue burlado por el grupo de equipo y este respondió irónicamente de forma amanerada, lo que llamó la atención de Hugo para volcarlo a su sketch; en ese entonces y ante su fuerte repercusión fue criticado duramente por los militares por su expresión de identidad sexual, por lo que el equipo de producción se vio impulsado a casar al personaje con el de la actriz Mónica Gonzaga, a pesar de que continuó con dichas orientaciones.
También trabajó en la serie de Telefé, «Los exitosos Pells», donde protagonizaba al director del ficticio canal de televisión «Mega News», Franco Andrada.
En 2009 junto a Fernanda Mistral, Rita Cortese y Norman Brisky participa del telefilm italiano «Scussate il disturbo» de Luca Manfredi (hijo del gran Nino Manfredi).
Además, trabajó en otros grandes éxitos de la TV argentina:»Tiempo Final» (2001), «Resistiré» (2003), «Mujeres Asesinas» (2005), «Para vestir santos» (2010), «Graduados» (2012), «Los vecinos en guerra» (2013), Viudas e Hijas del Rock & Roll (2014), «Otros Pecados» (2019) y «Tu parte del trato», en el mismo año.
El 10 de junio de 2013, sufrió un infarto mientras estaba en su casa, por el que fue hospitalizado e intervenido, siendo dado de alta dos semanas después.
Pero fue en el comercial del vino «Crespi» en 1972, llamado «Escarpines», que Hugo conquistó el corazón de un público que no lo olvidará jamás:
Hugo Arana en sí mismo permanecerá como un personaje de la cultura popular ya que los más grandes, pero también los más jóvenes, supieron admirarlo y no se resistieron al encanto de cada una de sus interpretaciones