El hecho ocurrió en el norte del país. Hay además numerosos heridos graves.
Una estampida ocurrida durante una peregrinación judía en el norte de Israel provocó “decenas de muertos”, anunciaron socorristas.
La Magen David Adom -equivalente israelí de la Cruz Roja- dijo que los fallecidos suman al menos 44 y hay unos 65 heridos, 20 de los cuales en grave estado, reportó The Times of Israel.
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La tragedia sucedió en la noche de este jueves por una estampida en la fiesta religiosa judía de Lag Baomer, en Mount Meron, en el norte del país. Se trata del evento más grande celebrado en el país desde que estalló la pandemia.
Seis helicópteros y decenas de ambulancias fueron trasladados al lugar para evacuar a las víctimas a hospitales de Jerusalén, Safed y Nahariya, entre otros.
En un primer momento se anunció que una grada se había derrumbado en uno de los conciertos, en el que participaban unas 100.000 personas. Sin embargo, el servicio de rescate dijo que la tragedia se produjo por una aglomeración y un “severo hacinamiento” de personas.
El Ejército de Israel envió a un equipo de rescate al lugar.
Miles de personas habían estado celebrando la festividad judía de Lag Baomer en la ciudad de Meron. Videos divulgados en las redes sociales antes de la tragedia mostraron a cientos de personas cantando, bailando y saltando.
El primer ministro israelí, Benjamin Netanyahu, dijo que el hecho es “desastre terrible”.
En plena noche, las sirenas de las ambulancias pululaban cerca del monte Merón, teatro de la tragedia.
La festividad judía de Lag Baomer se realiza en Meron, en torno a la tumba de Rabí Shimon Bar Yojai, un talmudista del siglo II al que se atribuye la redacción del Zohar, una obra central de la mística judía.
Lag Baomer es una festividad alegre que conmemora el final de una epidemia devastadora entre los alumnos de una escuela talmúdica en esa época.
Las autoridades, según la AFP, habían permitido la presencia de 10.000 personas en el recinto de la tumba, pero según los organizadores en todo el país se fletaron más de 650 autobuses, lo que supone al menos unas 30.000 personas. La prensa local estimó la afluencia en 100.000.
La prensa israelí mostró las imágenes impactantes de una decena de cuerpos inertes alineados en bolsas de plástico rodeados de socorristas sobre una pista de asfalto.
En 2019, un año antes de la pandemia que llevó a la cancelación de la peregrinación en 2020, los organizadores estimaron en 250.000 las personas que acudieron al lugar.
