La reunión fue larga con una duración de encuentro de tres horas, con algunos avances pero sin acuerdo definitivo. No habrá un nuevo acampe.
Tras más de dos horas de reunión, el Gobierno y los movimientos sociales más radicalizados que amenazaban con una nueva manifestación esta semana, en la previa de los feriados de Semana Santa, acordaron avanzar en una mesa de «diálogo permanente» y desde el Ministerio de Desarrollo Social ratificaron que no habrá más altas de planes sociales, por lo que el bloque de Unidad Piquetera avisó que este miércoles volverá a movilizarse, aunque sin acampe.
«El camino es vincular la generación de empleo con unidades productivas y reforzar la economía popular. Sin corte de calles siempre hay una mesa de diálogo que va a seguir funcionando», aseguró a Clarín Juan Zabaleta después del encuentro con los referentes sociales, con Eduardo Belliboni, del Polo Obrero, a la cabeza.
El ministro ratificó lo que la Casa Rosada sostiene desde hace varias semanas: «No hay más altas de planes sociales». Es uno de los principales reclamos de las organizaciones piqueteras: obtener más beneficios de los planes Potenciar Trabajo, que hoy alcanzan a unos 1,2 millones de personas.
Fue Belliboni, justamente, el que llevó la voz cantante tras la cumbre en las oficinas de Desarrollo Social, que se desarrolló mientras en la calle se enfrentaban un grupo de trabajadores del INCAA con la Policía porteña.
«No hay ningún acuerdo en el tema planes sociales. Tenemos pensado manifestarnos porque hasta donde sabemos es un derecho manifestarse libremente. El 13 salimos a las calles. Vamos a anunciar la metodología mañana en una conferencia de prensa, pero no tenemos pensado un acampe», resaltó en las puertas del ministerio el dirigente del Polo Obrero, que llegó a la reunión en compañía de Juan Ignacio Aldaya (Coordinadora por el Cambio Social), Mónica Sulle (MST), Carlos Fernández Kostiuk (FOL), Silvia Saravia (Barrios de Pie), Juan Fortunato (MTR) y Federico Alonso (Frente de Lucha Piquetero).
La medida del miércoles había sido votada en un plenario en Plaza de Mayo hace varias semanas, como parte de un plan de lucha.
Además de Zabaleta, los esperaban Emilio Pérsico, Gustavo Aguilera y Pablo Pais.
Según las fuentes, sí hubo avances en la implementación de refuerzos de «la política alimentaria» -a través del Sistema Alimentario Escolar (SAE) y de la entrega de productos a los comedores de todo el país-, y entre este martes y el miércoles volverán a reunirse en mesas técnicas para continuar con el diálogo. «Fue una buena reunión», calificaron fuentes oficiales.
«Estamos yendo hacia otro camino», agregaron desde el ministerio en alusión a la necesidad de reforzar una agenda vinculada con la creación de empleo.
El primer encuentro tuvo lugar el pasado jueves, y habían definido pasar a un cuarto intermedio hasta hoy con algunos avances en torno a los pedidos que los dirigentes sociales presentaron al ministro, centrados en la apertura y el aumento de los planes sociales y la ampliación de los productos alimenticios que reciben en los comedores populares distribuidos en todo el país.
La semana pasada, Zabaleta había anunciado junto a Alberto Fernández un aumento del 50% en el monto de la tarjeta Alimentar.
Y se había planteado, puertas adentro -fue Pérsico, según las organizaciones sociales, el que tiró el tema sobre la mesa-, la posibilidad de autorizar la inclusión de más beneficiarios al plan Potenciar Trabajo en reemplazo de aquellos que caducan mensualmente por fallecimientos, jubilaciones u otros motivos, y cuya cifra se ubica en torno al 2%.
«No hay más planes», insistieron con firmeza desde el Gobierno tras la reunión, y desecharon esa opción.
El Gobierno había sido muy tajante en la negativa a dar «más altas de planes». Y en sostener, al menos desde la retórica pública, un discurso de rechazo a los cortes de calles. En especial después del acampe de 48 horas de hace casi dos semanas que colapsó el centro porteño.
