Un reciente informe del diario Financial Times describe un panorama económico argentino marcado por una creciente tensión financiera y cuestionamientos profundos sobre la sustentabilidad de las medidas tomadas por el gobierno. El texto apunta que los intentos por mantener la estabilidad del peso, mediante intervenciones del Banco Central, han exigido sacrificios que podrían socavar otros frentes críticos de la economía.
Una de las señas de alarma es la fuerte venta de reservas por parte de la autoridad monetaria, que en pocos días realizó desembolsos millonarios para contener la depreciación de la moneda local. Esa estrategia, aunque necesaria según el análisis, se considera poco viable a mediano plazo si no se acompaña de recuperación real de la actividad económica.
El artículo destaca que esta dinámica tiene costos visibles: crecimiento estancado, inflación persistente, y una falta de señales claras de mejora en el consumo y empleo. También advierte que la política cambiaria actual está bajo escrutinio, con mercados y actores privados mostrando urgencia por definiciones más firmes.
En síntesis, el pronóstico del Financial Times es claro: sin cambios estructurales que sostengan el tipo de cambio, sin mejoras en ingresos reales o control de la inflación, la economía seguirá bajo presión. Se plantea implícitamente que decisiones próximas podrían definir si el rumbo elegido logra mantener confianza o si debe corregirse con urgencia.

