La situación fue detectada por un cruce de datos encarado por el Ministerio de Salud bonaerense. De todos modos, el gobierno provincial no planea bloquear turnos.
Más de 75 mil personas residentes de la Ciudad de Buenos Aires fueron inmunizadas en la Provincia desde que comenzó la campaña de vacunación contra la covid-19.
La información se desprende de un cruce de datos realizado por el Ministerio de Salud bonaerense entre el registro de ciudadanos vacunados hasta el momento e información del Registro Nacional de las Personas (Renaper), que reveló que, en muchos casos, los residentes de la ciudad utilizaron domicilios ajenos para registrarse.
«Entendemos que esto tiene que ver con nuestra estrategia de tener desde el principio una campaña más abierta, de permitirle a todo el mundo preinscribirse. La Ciudad no tomó esa decisión y al día de hoy, si uno tiene 60 años y vive ahí, todavía no sabe qué va a pasar», dijo a Página 12 Nicolás Kreplak, viceministro de Salud bonaerense, que adelantó que, por el momento, y aunque existe la posibilidad de hacerlo, no planean bloquear turnos ya que «lo único que se conseguiría es perjudicar a la gente que necesita vacunarse».
En las últimas semanas, a la cartera sanitaria provincial empezaron a llegar diversas informaciones que daban cuenta de personas que, teniendo domicilio en CABA, habían logrado vacunarse en distritos del conurbano bonaerense utilizando para registrarse direcciones ajenas, ya sea laborales, de familiares o de amigos. Al cruzar la información existente de la campaña de vacunación con la base de datos del Renaper, se descubrió que eran 75.901 las personas inmunizadas en territorio provincial que tenían domicilio de CABA en el DNI.
Según los datos a los que accedió Página/12, de ese total, la mayor parte de las personas (46.496) fueron vacunadas como «mayores de 60 años», mientras que 21.770 lo hicieron como personal de salud, ya sea de terapias intensivas o no. Luego aparecen otros grupos prioritarios como «docentes y auxiliares de inicial, primaria y secundaria» con 3.169 inoculados, o personal de las fuerzas de seguridad con 370.
Al inicio de la campaña de vacunación, cuando recién se comenzaba a inmunizar a los equipos de salud y en medio de las fuertes campañas antivacunas, el Ministerio tomó la decisión de aplicar las dosis igual a aquellos trabajadores de la salud de hospitales bonaerenses que, por una razón u otra, tenían domicilio en otras jurisdicciones del país.
Sin embargo, aun dentro de los 21.770 trabajadores de la salud residentes de CABA vacunados, el número de inmunizados de este modo es bajo, y el predominio continúa siendo de los «mayores de 60 años», tal como lo muestran las cifras. En esos casos, el único modo en que pudieron acceder a los turnos de vacunación es a través de la utilización de domicilios ajenos ubicados en territorio provincial.
Desde la cartera sanitaria bonaerense atribuyen las razones de este fenómeno, en primer lugar, a las ya conocidas diferencias en las estrategias de asignación de turnos aplicadas a un lado y al otro de la General Paz y el Riachuelo. Mientras en Ciudad la inscripción se realiza por orden de grupos prioritarios y se abre una vez que la jurisdicción recibe nuevas dosis, en Provincia la preinscripción es abierta, pública y permanente, por lo que cualquier residente bonaerense mayor de 18 años puede registrarse para que luego las autoridades asignen los turnos de acuerdo a los grupos prioritarios.
A su vez, la vacunación en territorio provincial ya avanzó hasta alcanzar a los mayores de 60 años, mientras que en CABA recién este martes se abrió la inscripción para la franja de entre 65 y 69 años. Esta diferencia de «velocidad» en la campaña parece ser la principal motivación para aquellos ciudadanos porteños que decidieron inscribirse en PBA con domicilios ajenos. «Al día de hoy, si uno tiene 60 años y vive en la ciudad todavía no sabe qué va a pasar, y es evidente que muchos de ellos ya se inmunizaron en la provincia», señaló Kreplak.
Aunque la cifra de 75.901 vacunas suena baja frente a las 2.327.628 primeras dosis que, según el monitor público del Ministerio, ya se han aplicado en territorio bonaerense, no deja de ser un número significativo si se tiene en cuenta la población de esa jurisdicción que aún queda por inmunizar y que podría haber recibido las vacunas.
En este sentido, y aunque reconoció que la situación genera un «problema», ya que «la proporción de vacunas que nos otorga Nación se calcula en función de las personas que tenemos radicadas», Kreplak adelantó que por el momento no planean bloquear nuevos turnos que se tomen de esta manera.
A partir de la base de datos del Renaper existe la posibilidad de preparar el sistema online de preinscripción provincial para que, de forma automática, solicite a quienes quieran pedir sus turnos que validen la información requerida con los datos del domicilio que aparecen en el DNI. De esta manera, si la persona utiliza un domicilio diferente al que tiene registrado en el Renaper no podría acceder a la preinscripción.
«En principio decidimos no bloquearlos, no solo por los ciudadanos de la ciudad sino también por los que tienen domicilio en otras provincias, que ya son situaciones aún más complejas», señaló el funcionario. En este sentido, Kreplak aclaró que «obviamente no estimulamos esta práctica, pero si nos pusiéramos más estrictos lo único que se conseguiría es perjudicar a la gente que necesita vacunarse, y lo cierto es que las dosis las pone todas Nación. En todo caso, si se llegara a generar un desbalance, necesitaríamos que se compensen».