Si bien, lentamente, la inflación va cediendo el Índice de Precios al Consumidor (IPC) registró una desaceleración en mayo, tras avanzar un 7,8%, según la medición del Instituto Nacional de Estadísticas y Censos (INDEC).
Esto se da por un ajuste promedio menos pronunciado del rubro de “alimentos y bebidas”, que avanzó 5,8% en el quinto mes del año, tras subir un 10,1% en abril. De acuerdo a los datos publicados por el organismo, el incremento más marcado lo tuvo el tomate redondo, que pasó de costar $697 por kilo en abril a $964,66 en mayo (38% más).
En segundo lugar aparece el azúcar, un producto que escasea en todo el país debido a las mermas productivas a causa de la sequía. De acuerdo a la medición oficial, el kilo se encareció un 29% durante mayo (saltó de $355,67 a $459,16).
El podio se completa con el arroz blanco simple, que registró un avance del 18%, tras pasar de costar $259,86 por kilo en el cuarto mes del año a $318,44 promedio en el quinto.
El resto de las subas, entre los alimentos de mayor incremento, fue bastante pareja. En el cuarto lugar se ubicó la lata de 220 gramos arvejas secas remojadas, que aumentó 17% ($131,53 a $153,57). Le siguieron en orden descendente el tomate entero en conserva -la lata subió 15%)-, el paquete de manteca de 200 gramos (14%) y el paquete de yerba de medio kilo (14% de ajuste).
Completan la lista de los diez productos alimenticios de mayor incremento el pan francés tipo flauta (el kilo subió 13%), el pote de dulce de leche de 400 gramos (13%) y el paquete de medio kilo de fideos secos (12%).