«Puede haber más aedes aegypti», le dice a Clarín Victoria Micieli, bióloga con orientación en zoología e investigadora principal del Conicet. Y explica que «hay muchos criaderos -esos recipientes artificiales del vector del dengue- que se llenaron de agua y no se vacían; y hacen que los huevos eclosionen. Eso va a provocar un aumento en la abundancia del aegypti».
Por otro lado, Laura Harburguer, doctora en biología (Conicet) y especialista en insectos, explica que no hay una relación directa entre las precipitaciones y el mosquito del dengue. «Depende mucho de la Ciudad. Nuestro país tiene diferentes características dónde se va acumulando el agua. Entonces, depende mucho del agua potable y del comportamiento de las personas. Hay ciudades donde donde los principales criaderos están en el interior de la vivienda. Otros están afuera, donde podrían ser afectados por las lluvias. Pero no hay una relación directa. Además, las hembras del aegypti no ponen los huevos ni bien se alimentan, pueden tardar varios días».
Harburguer también asegura que es difícil determinar si habrá otra invasión del mosquito de la inundación por las lluvias. «Es un organismo y no se comporta con una exactitud determinada. Hay que ver si las hembras se alimentaron y pusieron los huevos. Además, no todos los huevos eclosionan. Y tampoco podemos saber si las hembras llegaron a poner los huevos antes de las lluvias».
¿Quiénes deben vacunarse contra el dengue?
El dengue se contagia cuando el mosquito se alimenta con sangre de una persona enferma y luego pica a otros y les transmite la infección que genera la enfermedad. Nunca se contagia de una persona a otra, ni a través de objetos o de la leche materna.
La vacuna contra el dengue consiste en dos dosis separadas por un intervalo mínimo de tres meses. Especialistas consultados por Clarín explican quiénes deberían aplicársela, en cuánto tiempo brinda inmunidad y cuánto dura esa protección.
“La vacuna puede aplicarse desde los 4 años y sin límite de edad. Está contraindicada para embarazadas, mujeres que están amamantando y personas inmunosuprimidas”, le cuenta a este diario Eduardo López, médico infectólogo pediatra, jefe del departamento de Medicina del Hospital de Niños Ricardo Gutiérrez.
Según el especialista, las personas que ya tuvieron dengue serán las más beneficiadas con la vacuna, ya que en ellos la protección es fundamental teniendo en cuenta que es muy riesgoso contagiarse nuevamente. “Este grupo debería tener prioridad, aunque la realidad es que hay gente que tuvo dengue en forma asintomática y no lo sabe”, señala López.
“La inmunidad se consigue 10 días después de la aplicación de la segunda dosis, sin embargo, seguramente ya a partir de la primera aplicación se desarrolle cierto nivel de anticuerpos”, sostiene el infectólogo.
Consultado por Clarín, el ministro de Salud porteño, Fernán Quiros, expresó que la decisión de aplicar la vacuna en forma masiva se tomará luego de que la Comisión Nacional de Inmunizaciones (CoNain) le dé el visto bueno. Ese organismo decidió esperar unos ocho meses para conocer en el terreno la eficacia de la vacuna. Por lo que habría definiciones a mitad de este año.
Como principales conclusiones, la aplicación de 2 dosis de la vacuna evidenció una reducción del 84% en las hospitalizaciones por dengue y una disminución del 61% los casos de dengue sintomático.
La vacuna fue aprobada por ANMAT en abril del año pasado, y su incorporación a una estrategia de vacunación nacional es una definición que requiere contar con información y evidencia científica para poder establecer su efectividad, y sobre qué edades se obtiene mejores resultados.
A la fecha, la Comisión Nacional de Inmunizaciones (CoNaIn), recomendó realizar una evaluación sobre casos testigos y experiencias que se van desarrollando en las zonas con mayor circulación del país y en los países de la región, que permita arribar a una definición para la formulación de una estrategia nacional.
Y en esta instancia se está trabajando desde el Ministerio de Salud de la Nación, en articulación con las autoridades sanitarias provinciales. Además de reforzar las acciones para la vigilancia, prevención, control y seguimiento de la situación epidemiológica.
Síntomas
El dengue es una enfermedad viral transmitida por mosquitos, cuyo principal vector es la especie Aedes aegypti. Actualmente, constituye una importante amenaza para la salud pública mundial, con riesgo de infección en más de 125 países, incluidos muchos de América Latina. El dengue grave se ha convertido en una de las principales causas de hospitalización y muerte entre niños y adultos en algunos países de la región.
Entre los principales síntomas está la fiebre, dolor de cabeza intenso, dolor detrás de los ojos, dolor muscular y en las articulaciones, diarrea y vómitos. También puede generar erupciones en la piel.