Desde que ganó las elecciones, porque sí casí que las ganó el con toda su historia en las espaldas, se mantuvo en un silencio hermético. ¿La razón? No quiere perder un sólo segundo y ya está detras de un borrador muy extenso con nombres de todo tipo que depende de la situación económica que encuentren en el club.
En base a como estén los números se comenzará a trabajar en refuerzos top o terrenales según como estén las arcas en Brandsen 805. Entre los top está el recontra mencionado por todos: Paolo Guerrero, pero ojo es más un sueño de la dirigencia que de Roman, a quien tampoco le digusta. Terrenales suena Lucas Barrios y una sorpresa: El Pepe Sand. Sí, este Boca no sólo tendrá sangre joven también buscan un vestuario de hombres, en pocas palabras buscan caudillos.
Dejando atrás el tema delanteros, en el medio hay al igual que en la delantera, sueños y realidades. Entre los sueños está una obsesión de Roman, Aranguiz. El chileno es un jugador que le encanta al 10 y si los números dan van a intentar iniciar negociaciones. Más atrás viene Nico Gaitán, de gusto de todos y Centurión muy bancado por Román pero que los últimos rumores lo alejaron un poco de la orbita Xeneize, aunque están en tratativas. En la dirigencia tampoco ven con malos ojos la posibilidad de Gary Medel, viejo conocido del club. Otro objetivo es el enganche, porque sí o sí Roman quiere que Boca vuelva a tener enganche, entre las opciones se encuentran: Mudo Vázquez, más alcanzables y los top Maxi Moralez y hasta Papu Gomez.
En el fondo la cosa parece estar más calma, una de las obsesiones de Román es mantener al arquero y a la dupla de centrales como sea, eso sí con el Junior Alonso podría tener más oportunidades. Con respecto a los laterales sueñan con Renzo Saravia y una promesa Di Placido, el defensor granate podría entrar a modo de canje por Jara. En el lateral izquierdo quieren recuperar a Fabra, aunque lo ven dificil.
Después van a escuchar miles de nombres más que suenan como el caso de Lodeiro, Maxi Rodriguez, Gaich, entre otros pero por ahora suena más a una ficción periodistica que a una realidad.