Según los datos que surgen en nuestro país, el informe enviado desde el FBI al juez federal de Lomas de Zamora, Carlos Villena, asegura que Gholamreza Ghasemi, el piloto del avión venezolano-iraní que se encuentra retenido en Ezeiza desde el 6 de junio, es un terrorista iraní.
El mensaje es contundente y los datos siguen sorprendiendo. “Gholamreza Ghasemi es CEO y miembro del Consejo de Administración de Fars Air Qeshm. Además de su posición, Ghasemi también es piloto”, advierte el documento. Y añade: “Fars Air Qeshm fue señalada por el Tesoro de los Estados Unidos en 2019 debido a su participación directa en la actividad terrorista y la asistencia que proporciona a la Fuerza Quds y a la aerolínea iraní Mahan Air, que han sido señaladas como entidades terroristas”.
Con esta información, el juez Villena podrá avanzar con una imputación formal contra Ghasemi ya que -de acuerdo a las pruebas que llegaron desde Washington a su despacho- pertenece a la Guardia Revolucionaria Islámica de Irán.
El FBI asegura que Gholamreza Ghasemi fue sancionado por el Tesoro de los Estados Unidos en 2019 debido a su participación directa en la actividad terrorista y la asistencia que proporciona a las Fuerzas Quds y la aerolínea iraní Mahan Air, que han sido designadas como entidades terroristas.
Fars Air Qeshm, del cual Ghasemi es ssu CEO, opera vuelos de carga bajo cobertura civil para las Fuerzas Qods y el IRGC, y los utiliza para contrabandear armas y equipos sensibles de Irán a Siria, entre otras cosas. Esta actividad es parte de los esfuerzos de Irán para establecer presencia militar en todo el mundo.
Estados Unidos sostiene que Fars Air Qeshm opera vuelos entre Irán y Siria de forma regular. Y que como parte de los esfuerzos realizados por Irán y la Fuerza Quds para equipar a Hezbollah con armas y componentes militares avanzados, éstos están siendo contrabandeadas desde Irán a Hezbollah en el Líbano utilizando vuelos civiles de Teherán a Damasco.
Además, se sabe que un avión que pertenece a Fars Air Qeshmr ha transferido equipos de Irán a Hezbollah en Líbano utilizando la ruta entre Teherán y Beirut.
El terrorista Ghasemi llegó a Buenos Aires como piloto de un Boeing modelo 747-300M con matrícula YV3531, que pertenece a la empresa Transportes Cargo del Sur (Emtrasur), una filial del Consorcio Venezolano de Industrias Aeronáuticas y Servicios Aéreos (Conviasa).
Ghasemi también había sido el piloto del vuelo realizado por esa aeronave el 13 de mayo pasado entre Paraguay y Aruba para transportar un cargamento de cigarrillos valuado en apenas USD 755 mil.
Según el FBI, Emtrasur parece haber comprado el avión Boeing 747 con número de cola YV3531 de la aerolínea iraní Mahan Air, que está designada bajo las sanciones contra terrorismo y la no proliferación de las autoridades de los EE.UU.
El Emtrasur 747 se pudo identificar por el número de serie de su fabricante (MSN) 23413, que es un número de identificación único asociado con la aeronave.
Este MSN coincide con el número de un avión que anteriormente era propiedad de Mahan Air, que tenía el número de cola EP-MND.
Otra información sobre la aeronave, incluida la fecha de fabricación y el modelo, sugiere que la aeronave actualmente operada por Emtrasur, es la misma aeronave que anteriormente operaba Mahan Air.
“Si Mahan Air conserva una participación en la propiedad de la aeronave aún se consideraría propiedad bloqueada de Mahan Air”, sostiene el documento.
Además, “las personas que proveen bienes o servicios a la aeronave podrían estar expuestas a sanciones sobre la base de que estarían proporcionando bienes o servicios a Mahan Air”, advierte.
Incluso, desde el FBI dicen que las transacciones con Emtrasur también parecen presentar un riesgo potencial de sanciones bajo las autoridades sancionatorias a Venezuela en los EE.UU.
Emtrasur es una subsidiaria de propiedad mayoritaria de Conviasa, en base a información pública y el Decreto que creó Emtrasur (Decreto N° 4.379 de 2020). Conviasa está sujeta a sanciones de los EE.UU en virtud de la Orden Ejecutiva 13884 por ser una subdivisión, agencia o instrumento político del gobierno de Venezuela.
“Como resultado de que Emtrasur es propiedad de Conviasa en un 50% o más, Emtrasur está bloqueada bajo la ley. En consecuencia, todo bien o participación en un bien de Emtrasur que se encuentre en los Estados Unidos, que en el futuro entre en los Estados Unidos, o que esté o en el futuro esté en posesión o control de cualquier persona de los EE.UU, está bloqueado y no pueden transferirse, pagarse, exportarse, retirarse, o comercializarse de otro modo”, asegura el dossier remitido a la justicia federal.
“A modo de referencia, el 25 de octubre de 2007, el Departamento de Estado designó bajo la Orden Ejecutiva 13382 una importante entidad iraní de preocupación por la proliferación: el Cuerpo de la Guardia Revolucionaria Iraní (IRGC, también conocido como Cuerpo de la Guardia Revolucionaria Iraní). El Departamento del Tesoro también designó al IRGC-QF bajo la Orden Ejecutiva (EO) 13224 para proporcionar apoyo material a los talibanes y Hezbollah”, sostiene el documento que le llegó al juez Villena.
El FBI relata que la Fuerza Quds tuvo una larga historia de apoyo a las actividades militares, paramilitares y terroristas de Hezbollah, proporcionándole orientación, financiación, armas, inteligencia y apoyo logístico.
Cuenta que la Fuerza Quds opera campos de entrenamiento para Hezbollah en el valle de Bekaa, en el Líbano, y al parecer entrenó a más de 3.000 combatientes de Hezbollah en las instalaciones de entrenamiento del IRGC en Irán.
Dijo que esa fuerza terrorista proporciona aproximadamente entre 100 y 200 millones de dólares en fondos al año a Hezbollah y ayudó a Hezbollah a rearmarse en violación de la Resolución 1701 del Consejo de Seguridad de las Naciones Unidas.
El 13 de octubre de 2017, la Oficina de Control de Activos Extranjeros (OFAC) del Departamento del Tesoro de los Estados Unidos designó al IRGC de conformidad con la E.O. 13224 del Departamento del Tesoro de los Estados Unidos y de conformidad con la Ley de Adversarios de Estados Unidos a través de las sanciones.
La OFAC designó al IRGC para sus actividades en apoyo del IRGC-QF, que fue designado de conformidad con la E.O. 13224 el 25 de octubre de 2007, para prestar apoyo a varios grupos terroristas, entre ellos Hezbollah.
El 15 de mayo de 2018, la OFAC impuso sanciones al gobernador y a un alto funcionario del Banco Central de Irán, un banco con sede en Iraq y su presidente, y a un funcionario clave de Hezbollah, todos los cuales han trasladado millones de dólares en nombre del IRGC-QF a Hezbollah.
La OFAC señala que Muhammad Qasir actuó como un conducto crítico para los desembolsos financieros del IRGC-QF a Hezbollah y que trabajó con el IRGC-QF para transferir fondos.
En octubre de 2011, la OFAC sancionó a Mahan Air de conformidad con la E.O. 13224 por proporcionar apoyo financiero, material o tecnológico para IRGC-QF. La aerolínea también ha transportado armas y personal para Hezbollah.